Qué es una pérgola bioclimática
Las pérgolas bioclimáticas se han convertido en una de las soluciones más utilizadas para mejorar el confort en terrazas y jardines. Aunque su presencia es cada vez más habitual, todavía existe cierta confusión sobre qué son exactamente y qué las diferencia de otras pérgolas. En este artículo aclaramos el concepto de manera sencilla y directa.
¿Qué es una pérgola bioclimática?
Una pérgola bioclimática es una estructura de exterior diseñada para regular de forma natural la luz, la sombra, la ventilación y la protección frente a la lluvia mediante un sistema de lamas móviles.
Su objetivo es adaptar el espacio exterior a las condiciones del momento, haciendo que la zona sea más cómoda y utilizable durante más tiempo.
La clave es que no es un techo fijo, sino un sistema ajustable que responde al clima.

Cómo funciona
El funcionamiento se basa en un conjunto de lamas orientables ubicadas en la parte superior de la estructura:
- Cuando se abren, permiten el paso de luz y favorecen la ventilación natural.
- Cuando se cierran, actúan como un techo protector que bloquea la lluvia.
- El agua se dirige hacia un sistema de canalización integrado, que la evacua de forma discreta por el interior de la estructura.
Según el modelo, las lamas pueden orientarse manualmente o mediante un motor.
Por qué se llama «bioclimática»
Se denomina “bioclimática” porque está pensada para aprovechar las condiciones del clima en beneficio del confort del usuario:
- Regula la radiación solar.
- Favorece la circulación del aire.
- Reduce el impacto directo del calor.
Todo ello sin necesidad de elementos adicionales ni sistemas complejos. El propio clima es el que determina cómo debe ajustarse la pérgola.
Componentes básicos
Aunque cada fabricante puede incorporar variaciones, los elementos esenciales suelen ser:
- Estructura de aluminio, resistente a la intemperie.
- Lamas orientables, el elemento clave del sistema.
- Mecanismo de accionamiento, manual o motorizado.
- Canalización oculta, que evacúa el agua cuando las lamas están cerradas.
Son componentes pensados para garantizar estabilidad, durabilidad y un funcionamiento eficiente.

Ejemplo sencillo para entenderlo
Imagina una terraza a pleno sol por la mañana.
Abres ligeramente las lamas para dejar entrar algo de luz y permitir la ventilación.
A mediodía, cuando el sol es más intenso, cierras las lamas para generar sombra.
Si llueve, simplemente cierras por completo y el agua se evacúa por la estructura.
Esa capacidad de adaptarse al clima en cada momento es lo que define a una pérgola bioclimática.
Una pérgola bioclimática es una estructura con lamas orientables diseñada para regular la luz, la sombra, la ventilación y la lluvia, aprovechando el comportamiento del clima.
Funciona mediante un sistema de lamas móviles y canalización oculta, y permite crear espacios exteriores más cómodos y aprovechables de una forma simple y natural.
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